Miel y Canela
La combinación de miel y canela es uno de los remedios más efectivos para combatir el acné. Las propiedades antimicrobianas de la canela pueden ayudar a inhibir el crecimiento de las bacterias responsables de las imperfecciones. Por su parte, la miel actúa como un antibiótico natural que puede contribuir a eliminar el acné. Para aprovechar este poderoso mix, se recomienda mezclar dos cucharadas grandes de miel con una cucharadita de canela. A continuación, se debe lavar el rostro con agua, aplicar la mezcla sobre la piel y dejar actuar durante 15 minutos. Finalmente, se enjuaga el rostro y se seca dando ligeros toques con una toalla de papel.
Ácido Acetilsalicílico
El uso de una mascarilla con ácido acetilsalicílico puede ayudar a reducir la inflamación causada por el acné. Este método es económico y fácil de realizar. Para prepararla, se recomienda mezclar una parte de ácido acetilsalicílico con tres partes de agua. Luego, se aplica la mezcla sobre las imperfecciones y se deja secar completamente, lo cual puede tardar aproximadamente 30 minutos. Después de este tiempo, se debe limpiar la piel con una toalla. Es importante mencionar que se puede añadir opcionalmente un poco de miel o yogur al preparado.
Peróxido de Benzilo
El peróxido de benzoilo es uno de los tratamientos más comunes utilizados para erradicar las bacterias que causan el acné. Además, ayuda a eliminar las células muertas de la piel, lo que la hace lucir más radiante y saludable. Este producto se puede adquirir en farmacias y su aplicación consiste en colocar una pequeña cantidad sobre las lesiones y dejar actuar durante varias horas, seguido de un enjuague con agua. Se recomienda repetir este proceso en el mismo día y seguir las instrucciones incluidos en el producto para obtener los mejores resultados. Se sugiere utilizar una concentración de aproximadamente 2.5%, ya que es menos irritante para la piel.