Causas de la apnea del sueño

Causas del ahogamiento relacionadas con la posición al dormir

En algunas situaciones, la posición del cuerpo puede ser un factor que contribuya al ahogamiento durante el sueño, especialmente al dormir boca arriba. En esta postura, la lengua y algunos tejidos blandos, junto con la mandíbula, se desplazan hacia atrás, obstruyendo el flujo de aire a través de las vías respiratorias. La situación no cambia drásticamente al dormir boca abajo, ya que inclinar la cabeza hacia un lado o apoyarla en la almohada puede también dificultar la respiración.

Esta condición puede observarse asimismo en los niños, cuando adoptan posiciones de sueño incómodas o diferentes a las que están acostumbrados.

Causas patológicas del ahogamiento durante el sueño

El ahogamiento durante la noche puede ser indicativo de un problema de salud específico, como los siguientes:

Apnea obstructiva del sueño

La apnea obstructiva del sueño es la causa más común de ahogamiento al dormir. Esta condición ocurre cuando los músculos de la garganta se relajan temporalmente, provocando el bloqueo de las vías respiratorias y resultando en pausas respiratorias de 10 segundos o más.

La apnea obstructiva es común entre las personas con sobrepeso u obesidad, debido al impacto del tejido graso que obstruye la respiración. Los hombres, los ancianos y los fumadores presentan mayores tasas de esta condición. Sus síntomas incluyen:

  • Ronquidos fuertes.
  • Dolores de cabeza al despertar.
  • Despertar frecuente durante la noche, a menudo asociado con ahogos o jadeos.
  • Dificultad para concentrarse durante el día.
  • Alteraciones del estado de ánimo.
  • Sequedad de garganta o boca al despertar.

Reflujo gastroesofágico

Los factores que ayudan a mantener el ácido en el estómago sin que se regrese hacia el esófago o la garganta son:

  • La gravedad.
  • La producción de saliva, que ayuda a neutralizar el ácido estomacal.
  • La deglución continua mientras se está despierto, lo que reduce la posibilidad de reflujo ácido.

Sin embargo, al dormir, estos factores dejan de ser efectivos y aumentan la probabilidad de que el ácido regrese al esófago.

El vínculo entre el reflujo gastroesofágico y el ahogamiento durante el sueño no está completamente claro. Puede ser que el ahogamiento sea resultado de un impacto negativo en la respiración y las vías respiratorias debido al reflujo, o que el esófago sea más susceptible al reflujo por la falta de sueño causada por el ahogamiento. No obstante, ambas condiciones parecen afectadas por factores similares, entre ellos:

  • El tabaquismo.
  • Consumo de alcohol.
  • Obesidad.

Asma

El asma puede aumentar la severidad del ahogamiento durante la noche, y a su vez, el ahogamiento puede agravar la condición asmática, tal como lo indica el Dr. Ronald Chervin.

Quienes padecen asma crónica pueden experimentar dificultades respiratorias al dormir, siendo más propensos al ahogamiento en comparación con quienes no sufren esta enfermedad, según un estudio publicado en el Journal of the American Medical Association en 2015.

Fallo cardíaco

El fallo cardíaco puede causar acumulación de líquidos y sodio en el cuerpo, lo cual está relacionado con el ahogamiento durante el sueño. Estos líquidos pueden infiltrarse en los pulmones al acostarse, ocasionando pausas en la respiración y ahogamiento, además de que la misma enfermedad afecta la eficacia de la respiración.

Edema pulmonar

El edema pulmonar se caracteriza por la acumulación de líquidos en los pulmones, lo que compromete la función respiratoria. Las personas afectadas pueden tener problemas respiratorios al estar acostadas o al dormir.

El fallo cardíaco, que también puede provocar ahogamiento durante el sueño, es la causa más común del edema pulmonar.

Otras causas patológicas

Aparte de lo mencionado, existen otros trastornos que pueden contribuir al ahogamiento durante el sueño, como:

  • Alergias o problemas de salud que causan congestión e inflamación nasal.
  • Enfermedades que afectan el tronco encefálico, que regula la respiración, tales como accidentes cerebrovasculares, tumores cerebrales o encefalitis.
  • Diabetes tipo 2, donde aproximadamente tres cuartas partes de las personas diagnosticadas experimentan ahogamiento durante el sueño, dado que muchos también luchan con el sobrepeso.
  • Ansiedad y estrés, especialmente cuando son crónicos, pudiendo influir en el ahogamiento nocturno, así como otras enfermedades relacionadas con el estrés, como la hipertensión.

El ahogamiento como efecto secundario de ciertos medicamentos

Algunos tratamientos y medicamentos pueden dar lugar a ahogamiento durante la noche debido a su efecto en el estrechamiento de las vías respiratorias y a la interferencia en la respiración nocturna. Esto no implica que se deba suspender la medicación, sino que es crucial comunicar cualquier problema al médico para que tome las medidas adecuadas. Entre estos medicamentos se incluyen:

  • Analgesicos opioides: Estos son recetados para aliviar el dolor en condiciones severas y pueden ser responsables del ahogamiento al afectar la respiración nocturna. Ejemplos incluyen:
    • Codeína.
    • Fentanilo.
  • Benzodiazepinas: Prescritas para el tratamiento de la ansiedad, convulsiones o como relajantes musculares, pueden aumentar las alteraciones del sueño, incluido el ahogamiento. Entre ellas se encuentran:
    • Diazepam.
    • Alprazolam.
  • Barbitúricos: Estos son hipnóticos y dos ejemplos son:
    • Fenobarbital.
    • Tiopental.

Consejos para prevenir el ahogamiento durante el sueño

Existen varios pasos que pueden reducir la posibilidad de ahogamiento nocturno:

  • Evitar dormir boca arriba y optar por posiciones de lado utilizando almohadas adecuadas para minimizar la obstrucción de las vías respiratorias.
  • Dejar de fumar para disminuir el riesgo de ahogamiento nocturno y reducir problemas de salud que contribuyan a esta condición, incluyendo enfermedades cardíacas. Además, abandonar el tabaco beneficia la salud general.
  • Consultar con un médico sobre recomendaciones personalizadas para prevenir el ahogamiento al dormir, especialmente si el individuo padece alguna enfermedad como hipertensión, diabetes o sobrepeso, o si existe un historial familiar de problemas de sueño.
  • Informar al médico si se sospecha que algún tratamiento puede contribuir al ahogamiento durante la noche.
  • Evitar el consumo de alcohol y adoptar una dieta saludable para mantener un peso apropiado y favorecer la salud general.

¿Cuándo se debe consultar al médico por el ahogamiento durante el sueño?

En general, es esencial comunicar al médico cualquier problema relacionado con el ahogamiento durante el sueño. Es especialmente importante buscar atención médica si se presentan uno o más de los siguientes síntomas:

  • Emitir sonidos similares a ahogos o jadeos durante el sueño.
  • Sensación constante de fatiga durante el día.
  • Observación de pausas en la respiración durante la noche, generalmente notadas por otras personas.

Resumen del artículo

Las causas del ahogamiento durante el sueño varían; pueden deberse a posiciones inadecuadas al dormir, sobrepeso o a condiciones médicas específicas, así como a efectos secundarios de ciertos medicamentos. En todos los casos, se recomienda consultar con un médico al notar síntomas de ahogamiento nocturno para tomar las medidas de tratamiento adecuadas y evitar posibles complicaciones.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *