Síntomas de un aborto espontáneo
Los síntomas de un aborto espontáneo pueden variar según la etapa del embarazo. En algunos casos, puede ocurrir de manera repentina antes de que la mujer sea consciente de su embarazo. A continuación se detallan algunos de los síntomas relacionados con esta condición:
- Espasmos abdominales.
- Dolor intenso en la zona abdominal.
- Expulsión de tejido con coágulos a través de la vagina.
- Sangrado vaginal.
- Dolor en la parte baja de la espalda, que puede ser leve o severo.
Factores que contribuyen al aborto espontáneo
El aborto espontáneo se asocia frecuentemente con alteraciones genéticas que afectan al feto, y estas no están relacionadas con la madre. A continuación se presentan otras posibles causas de esta situación:
- Anomalías en el útero.
- Problemas de salud física en la madre.
- Reacciones del sistema inmunológico.
- Desequilibrios hormonales.
- Enfermedades crónicas que presente la madre, como disfunciones tiroideas y diabetes.
- Infecciones.
El riesgo de experimentar un aborto espontáneo es mayor entre las mujeres que han sufrido tres o más abortos previos, así como aquellas que padecen enfermedades tiroideas o diabetes. Asimismo, el riesgo incrementa en mujeres de 35 años o más.
Prevención del aborto espontáneo
Las anomalías genéticas en el feto son la causa más común de aborto espontáneo; de hecho, se estima que representan alrededor del 80% de los casos que ocurren antes de la décima semana de gestación. Aunque en la mayoría de los casos no es posible prevenir un aborto espontáneo, existen algunas medidas que pueden reducir la probabilidad de que ocurra:
- Evitar el uso de medicamentos, así como el consumo de alcohol y fármacos cuyo uso se considere inseguro durante el embarazo, ya que pueden generar complicaciones y poner en peligro la gestación debido al incremento en el riesgo de alteraciones genéticas en el feto.
- Tratar las condiciones médicas subyacentes que puedan llevar a la pérdida del embarazo, como enfermedades de la tiroides y diabetes.
- Consultar con un médico o partera en las primeras etapas del embarazo para abordar problemas de salud y detectar factores que incrementen el riesgo de aborto espontáneo.
- Mantener una dieta equilibrada y saludable, así como tomar los suplementos vitamínicos recomendados durante la etapa prenatal.