Las normas de la ofrenda en la escuela Hanafi

Reglas sobre la ofrenda (udhiyyah) según la escuela Hanafí

La ofrenda es el sacrificio de un animal específico con la intención de acercarse a Dios en un momento determinado. Se refiere a los sacrificios realizados de ganado como un acto de devoción a Allah -altísimo- durante los días de sacrificio. Esta práctica fue instituida en el segundo año de la emigración (hégira). En el Corán, Allah dice: “Y el ganado lo hemos hecho para ustedes como parte de los ritos de Allah”.

Las opiniones de los eruditos de la escuela Hanafí sobre la ofrenda son variadas y se pueden resumir así:

  • La ofrenda es obligatoria para cada musulmán libre, solvente y residente en el día de sacrificio. Esta es la opinión de Abu Hanifa y la mayoría de los juristas Hanafíes.
  • Otra opinión de Abu Hanifa es que la ofrenda es recomendada (sunnah), ya que no es obligatoria para aquellos que están de viaje, mientras que otras obligaciones como la limosna (zakat) y la oración no se eximen en caso de viaje.

Requisitos para la validez de la ofrenda según la escuela Hanafí

A continuación, se presentan los requisitos para que la ofrenda sea válida según la jurisprudencia Hanafí:

  • El animal destinado a la ofrenda debe estar libre de defectos que puedan afectar su carne o su salud.

Esto incluye los cuatro defectos comúnmente acordados que impiden la aceptación de la ofrenda: ceguera clara, enfermedad evidente, cojeo y delgadez extrema. Además, los animales que nacen sin orejas no son aceptados según esta escuela de pensamiento.

Existen también otros defectos que invalidan la ofrenda, tales como los animales que no tienen dientes, y aquellos que son considerados jalalah (animales que han consumido excrementos).

  • La ofrenda debe realizarse en un tiempo específico.

Este tiempo son los días de sacrificio y sus noches, que incluyen dos noches: la del segundo día, correspondiente a la noche del undécimo día de Dhu al-Hiyjah, y la del tercer día, correspondiente a la noche del duodécimo. No se puede realizar el sacrificio durante la noche de la festividad del Eid al-Adha.

Características del sacrificio según la escuela Hanafí

La ofrenda debe cumplir con ciertas características, que incluyen lo siguiente:

  • Está permitido sacrificar ovejas, vacas y camellos, mientras que no se acepta el sacrificio de animales salvajes. Si un animal es un híbrido de doméstico y salvaje, se tomaría en cuenta la especie materna.
  • Se permite el sacrificio de cabras, ya que son una variedad de ovejas, así como búfalos, que son considerados un tipo de vaca.
  • El animal a sacrificar debe haber alcanzado la edad mínima: las cabras y ovejas deben haber cumplido un año y entrar en el segundo, las vacas y búfalos deben haber cumplido dos años y entrar en el tercero, y los camellos deben tener al menos cinco años y entrar en el sexto.
  • Se permite sacrificar corderos jóvenes si son robustos, es decir, si tienen al menos seis meses de edad.
  • Las características recomendables para la ofrenda son: que sea un carnero corpulento, con cuernos, de pelaje claro y blanco, preferiblemente macho o castrado, siendo este último considerado mejor según la escuela Hanafí.

Recomendaciones para la ofrenda según la escuela Hanafí

Se recomienda a quien va a realizar el sacrificio: atar al animal antes de los días de sacrificio, lo cual implica preparación y deseo de agradar a Allah. Esto le proporciona una recompensa y mérito. Además, se debe adornar e identificar al animal como se hace con los sacrificios, para mostrar respeto. El traslado al lugar de sacrificio debe realizarse de manera gentil, evitando cualquier trato agresivo, y se alienta a que se realice el sacrificio personalmente.

Acciones desaconsejadas durante la ofrenda según la escuela Hanafí

Se considera indeseable que quien haya adquirido una ofrenda ordeñe al animal, le corte la lana, o saque provecho de él de cualquier manera, ya sea montándolo o utilizándolo para cargar, salvo si teme por la vida del mismo; en tal caso, puede ordeñarlo y donar la leche. Esto se debe a que cualquier beneficio obtenido puede disminuir la condición del animal, y la ofrenda debe ser íntegra para ofrecerla a Allah -altísimo-.

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