Causas de la coagulación sanguínea en mujeres embarazadas
La coagulación sanguínea es una preocupación común durante el embarazo, especialmente en el primer trimestre. A continuación, se presentan algunos factores que pueden aumentar el riesgo de trombosis durante esta etapa:
- Presencia de sobrepeso.
- Realización de viajes largos durante el embarazo.
- Intervención quirúrgica mediante cesárea.
- Tener antecedentes familiares de trombosis venosa profunda.
- Edad superior a 35 años.
- Estar inactiva por períodos prolongados.
- Fumar o estar expuesta al humo de tabaco de manera recurrente.
- Desarrollo de complicaciones durante el embarazo o el parto.
- Condiciones de salud preexistentes, como diabetes o enfermedades cardíacas y pulmonares.
Síntomas de la coagulación sanguínea en mujeres embarazadas
Existen varios síntomas que pueden indicar la presencia de trombosis venosa profunda, entre los cuales se destacan:
- Síntomas asociados con la trombosis en la pierna, conocidos como trombosis venosa profunda, que incluyen:
- Dolor o aumento de la sensibilidad en la zona afectada sin haber sufrido lesiones previas.
- Hinchazón en el miembro afectado.
- Cambio en el color de la piel en la región afectada, presentando enrojecimiento y una mayor sensibilidad al tacto.
- Síntomas relacionados con la embolia pulmonar, siendo los más comunes:
- Tos con expectoración de sangre.
- Dificultad para respirar.
- Dolor en el pecho que empeora al toser o respirar profundamente.
- Alteraciones en el ritmo cardíaco o aumento en la frecuencia del pulso.
Riesgos de la coagulación sanguínea durante el embarazo
La trombosis venosa profunda puede tener implicaciones serias durante el embarazo, presentando riesgos tales como:
- Accidente cerebrovascular.
- Formación de coágulos en la placenta.
- Embolia pulmonar.
- Infarto de miocardio.
- Aborto espontáneo.
Prevención de la coagulación sanguínea en mujeres embarazadas
Se pueden seguir diversas recomendaciones para prevenir la coagulación sanguínea durante el embarazo. Entre ellas se incluyen:
- Realizar actividad física con la aprobación del médico.
- Conocer los factores que aumentan el riesgo de coagulación sanguínea y el historial familiar relacionado, informando al médico sobre ello.
- Reconocer los síntomas y signos que indican la posible coagulación sanguínea durante el embarazo.
- Mover las piernas regularmente, especialmente durante viajes largos.