Pimiento picante
Investigaciones han demostrado que el consumo de pimiento picante contribuye a la dilatación de los vasos sanguíneos, mejorando la circulación y fortaleciendo las arterias, lo que facilita el flujo sanguíneo en el cuerpo. Esto se atribuye a la presencia de una sustancia llamada capsaicina, que actúa para reducir la presión arterial, además de promover la liberación de óxido nítrico, que también contribuye a la expansión de las arterias.
Cebolla y ajo
Estudios han revelado que las personas que consumen 4.3 gramos de cebolla diarios ayudan a la dilatación de las arterias y aumentan el flujo sanguíneo después de las comidas, gracias a su contenido en compuestos de flavonoides, que son antioxidantes esenciales para la salud del corazón, así como antiinflamatorios que facilitan el flujo sanguíneo y la dilatación arterial. Por otro lado, el ajo contiene compuestos azufrados, entre ellos la alicina, que también contribuyen a reducir la presión arterial y mejorar la circulación, ayudando a relajar las arterias; por lo tanto, el ajo es excelente para la salud cardiovascular.
Frutas y verduras
Se ha encontrado que el consumo de frutas ricas en fibra soluble, como manzanas, peras y plátanos, es beneficioso para la salud del corazón y para la dilatación de las arterias. Al incorporar entre 4 y 5 porciones diarias, los niveles de colesterol LDL (colesterol «malo») pueden disminuir, además de reducir el impacto del sodio en los vasos sanguíneos, debido a su contenido de potasio, el cual equilibra los niveles de sodio en el cuerpo. Las verduras, al igual que las frutas, contienen esteroles que funcionan de manera similar a la fibra soluble; además, aportan magnesio, presente en vegetales de hoja verde como las espinacas, que ayuda a regular la presión arterial.
Nueces crudas y legumbres
Las nueces crudas son ricas en ácidos grasos, tales como omega-3 y omega-6, que mejoran la salud y función arterial. También contienen magnesio, que previene la formación de depósitos que podrían restringir el flujo sanguíneo en las arterias. Se recomienda consumir alrededor de 3-4 porciones semanales de nueces como almendras, nueces y avellanas. Las legumbres, como lentejas, garbanzos y soya, también son ricas en fibra soluble, que aumenta el flujo sanguíneo; se aconseja consumir entre 3 y 4 porciones semanales de estas.
Cúrcuma
La cúrcuma contiene curcumina, que tiene varios beneficios para la salud. Se ha comprobado que puede ayudar a dilatar las arterias y mejorar la circulación sanguínea. Un estudio afirmó que el consumo de cúrcuma podría ayudar a las mujeres a prevenir enfermedades cardiovasculares, especialmente después de la menopausia. Además, la curcumina puede inhibir la producción de proteínas que enlazan las moléculas de grasa con los vasos sanguíneos, lo que provoca arteriosclerosis. En algunos casos, la curcumina podría usarse como un sustituto temporal del ejercicio para aquellos pacientes que no pueden realizar actividad física inicialmente.