Síntomas de la gota

¿Cuáles son los síntomas de la gota?

Los síntomas de la gota, también conocida como la enfermedad de los reyes, aparecen en forma de episodios que van y vienen. Los síntomas más comunes que se presentan durante un ataque incluyen:

  • Un dolor intenso y repentino en la articulación afectada, que a menudo se manifiesta a medianoche o en las primeras horas de la mañana.
  • Dolor al presionar o tocar la articulación.
  • Enrojecimiento o tonalidad púrpura en la articulación afectada, que puede sentirse caliente al tacto.
  • Rigidez e hinchazón de la articulación afectada.
  • Acumulación de cristales de ácido úrico bajo la piel y alrededor de la articulación con el tiempo, formando bultos conocidos como tofos, en caso de que la gota no se trate adecuadamente.
  • Dificultad para mover la articulación afectada, especialmente a medida que la enfermedad progresa.

Las articulaciones más comúnmente afectadas por la gota incluyen:

  • Los dedos del pie, especialmente el dedo gordo.
  • El medio del pie.
  • Los tobillos.
  • Las rodillas.
  • Los dedos de las manos.
  • Las muñecas.
  • Los codos.

¿Cómo son típicamente las crisis de síntomas de la gota?

Los síntomas de la gota se presentan en forma de crisis que pueden durar entre 7 y 14 días, y en algunas ocasiones, este periodo puede extenderse, provocando síntomas severos. Entre los episodios, el individuo puede no experimentar síntomas significativos.

En cuanto a la naturaleza de los síntomas durante las crisis de gota, se pueden destacar los siguientes aspectos:

  • Se producen principalmente durante la noche, aunque pueden ocurrir en cualquier momento del día.
  • Se desarrollan de forma repentina en el transcurso de varias horas.
  • Los síntomas tienden a repetirse con el tiempo si la persona no recibe el tratamiento adecuado.

¿Cuáles son los desencadenantes de los síntomas de la gota?

Existen varios factores que pueden aumentar la probabilidad de que aparezcan los síntomas de la gota, tales como:

  • Infecciones que elevan la temperatura corporal.
  • Consumo de comidas copiosas o abundantes.
  • Deshidratación.
  • Lesiones en la articulación.
  • Uso de ciertos medicamentos.

¿Cuándo se debe consultar a un médico?

Es importante acudir al médico de inmediato si se experimenta un dolor intenso en una articulación para que pueda diagnosticar y tratar la gota oportunamente, ya que un retraso en el tratamiento puede llevar a numerosas complicaciones, incluida la destrucción articular.

Si presenta algunos de los siguientes síntomas, dirígete a urgencias de inmediato, ya que podrían indicar una infección:

  • Fiebre.
  • Inflamación de la articulación.
  • Calor en la articulación.

¿Cómo sé si tengo gota?

Al visitar al médico, éste te preguntará acerca de la naturaleza de los síntomas que presentas y examinará la articulación afectada, notando posible hinchazón. Luego, solicitará una serie de pruebas de imagen para confirmar el diagnóstico, tales como:

  • Rayos X.
  • Ultrasonido.
  • Tomografía computarizada (TC).
  • Resonancia magnética (RM).

Además, hay otras pruebas que pueden ayudar al médico a diagnosticar la enfermedad, incluyendo:

  • Análisis de sangre para determinar el nivel de ácido úrico en la sangre.
  • Extracción de una muestra de líquido sinovial mediante una aguja para ser analizada en el laboratorio.

Video sobre la gota

Para conocer más sobre la gota, su tratamiento y métodos de prevención, te invitamos a ver el video.

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