Síntomas de la infección por tenias
En muchos casos, la infección por tenias (en inglés: Tapeworms) puede no mostrar síntomas evidentes. Sin embargo, la naturaleza y localización de los síntomas dependen del tipo específico de tenia. A continuación, se detallan los posibles signos de infección.
Infección intestinal
Entre los signos y síntomas asociados a la infección intestinal se encuentran:
- Náuseas.
- Debilidad general.
- Pérdida de apetito.
- Dolores abdominales.
- Diarrea.
- Mareos.
- Aumento del deseo por alimentos salados.
- Pérdida de peso y mala absorción de nutrientes del alimento.
Infección invasiva
Las tenias pueden causar daños en órganos y tejidos cuando se trasladan fuera del intestino, formando quistes en otros tejidos. Los síntomas asociados a esta forma de infección incluyen:
- Dolores de cabeza.
- Protuberancias o quistes.
- Reacciones alérgicas a las larvas.
- Convulsiones.
Complicaciones de la infección por tenias
Las complicaciones que surgen de una infección por tenias dependen del tipo de parasito involucrado y de si el paciente ha recibido tratamiento. A continuación, se listan algunas de las complicaciones más significativas:
- Cisticercosis: Esta afección ocurre cuando las larvas salen del intestino, provocando infecciones en otros tejidos y órganos del cuerpo, lo que puede resultar en la aparición de lesiones o quistes.
- Neurocisticercosis: En este caso, el cerebro y el sistema nervioso se ven afectados por la infección de la tenia.
- Echinococosis: Se caracteriza por la salida de larvas del tracto digestivo que afectan a otros órganos, especialmente el hígado, creando quistes de gran tamaño que pueden presionar vasos sanguíneos cercanos y afectar la circulación.
Prevención de la infección por tenias
Existen varias medidas y recomendaciones que se pueden seguir para prevenir la infección por tenias. Las más destacadas son las siguientes:
- Lavar las manos antes y después de usar el baño, así como antes de preparar y consumir alimentos.
- Evitar el consumo de pescado y carne cruda.
- Cocinar bien la carne a una temperatura mínima de 63 grados Celsius para cortes enteros y 71 grados Celsius para carne picada y aves de corral.
- Congelar la carne a -20 grados Celsius durante al menos un día, ya que esto ayuda a eliminar los huevos de la tenia.