El Último de los Libros Revelados
El Corán es considerado el último de los libros sagrados revelados por Dios. Se trata del libro final, que alberga un mensaje completo y que tiene autoridad sobre lo que fue revelado anteriormente. En este sentido, el Corán es un texto protegido, salvaguardado por Dios de alteraciones, modificaciones o adiciones.
El Corán es un libro milagroso, elocuente y claro tanto en su expresión como en su significado. Incluye relatos de las naciones pasadas y futuras, y las escrituras anteriores anunciaron su llegada. Este libro es extenso y abarca una mayor cantidad de legislaciones divinas y normas éticas que se encontraban en los libros anteriores. Además, su mensaje se dirige a toda la humanidad, incluidos los genios y los hombres, a diferencia de los libros anteriores que estaban dirigidos a pueblos específicos y periodos limitados.
Características del Corán en Relación a los Otros Libros Revelados
La creencia en todos los libros que Dios ha revelado es uno de los pilares de la fe islámica. El Corán se distingue de los otros textos sagrados al ser su abrogador y controlador, y es obligatorio seguirlo porque se reveló al Profeta Muhammad (la paz sea con él) para toda la humanidad. Las características del Corán se dividirán en dos secciones a continuación.
Características del Corán que lo Distinguen de las Escrituras Anteriores
El Corán tiene ciertas propiedades únicas en comparación con otros libros que deben ser creídas y aplicadas tanto en conocimiento como en acción. Entre estas características destacan:
Universalidad de la Invitación del Corán
La legislación del Corán abarca todas las criaturas, tanto los seres humanos como los genios, y por ello es necesario que ellos crean en él y adoren a Dios conforme a lo que se ha establecido. Esto se refleja en las palabras de Dios: «Bendito sea el que ha revelado el Discriminador a su siervo, para que sea una advertencia para todos los mundos», y en la declaración de los genios: «Dí: se me ha revelado que un grupo de genios escuchó y dijo: ‘En verdad, hemos oído un Corán asombroso que guía hacia la rectitud, y hemos creído en él'».
Tolerancia y Facilidad
Una de las características que distingue la legislación islámica del Corán es la ausencia de cargas y restricciones impuestas a los seguidores de las religiones anteriores, como lo establece el Corán: «Y eliminará de ellos su carga y los grilletes que llevaban».
Preservación Divina del Corán
Una de las singularidades del Corán es que Dios ha garantizado su preservación contra cualquier alteración en el lenguaje o el significado. Esto se demuestra en su declaración: «Ciertamente, nosotros hemos revelado el Recuerdo y, en verdad, nosotros lo preservaremos».
Dios también ha facilitado su interpretación a través de la inspiración al Profeta Muhammad (la paz sea con él) sobre los significados del Corán y las leyes que se deben derivar de él. Esto se ilustra en el versículo: «Ciertamente, somos nosotros quienes lo hemos reunido y lo hemos hecho leer; y cuando lo leamos, síguelo».
Dios ha preparado a eruditos competentes para memorizarlo desde la época del Profeta hasta hoy, quienes lo han preservado, comprendido y practicado, elaborando obras en diversos campos que lo promueven, como la interpretación, la lectura, y la distinción entre lo claro y lo confuso, entre otras áreas que manifiestan la preservación divina de Su libro tal como fue revelado a Su Profeta.
El Milagro del Corán
Aunque el Corán comparte algunos aspectos de milagro con los libros anteriores, se distingue por ser la gran, eterna e inmutable muestra del apoyo divino que acompaña al Profeta y a sus seguidores hasta el día del juicio. Como declaró el Profeta Muhammad (la paz sea con él): «No hay ningún profeta que no haya recibido algo similar en lo que la humanidad haya creído, y lo que se me ha dado es una revelación que me ha sido inspirada».
Una de las manifestaciones más importantes de la singularidad del Corán radica en su eloquencia y la belleza de su lenguaje, con una estructura que desafía a los genios y a los humanos a presentar algo similar, aunque han fallado en su intento. Este desafío se presenta en tres etapas:
- El desafío de traer un texto completo semejante al Corán, como se menciona: «Entonces que traigan un relato similar a él si son veraces».
- El desafío de producir diez capítulos como los del Corán, como se establece: «¿O dicen ellos que lo ha fabulado? Dile: entonces traigan diez capítulos como los suyos».
- El desafío de escribir incluso un solo capítulo como las ayat del Corán, tal como se expresa: «¿O dicen ellos que lo ha fabricado? Dile: entonces traigan un capítulo similar a él».
Claridad del Mensaje del Corán
El Corán abarca todas las necesidades de la humanidad en su vida cotidiana y en lo que respecta a su religión, como lo indica: «No hemos descuidado nada en el libro».
Facilidad para Recordar el Corán
Dios ha facilitado su recitación, lectura y reflexión para que la humanidad se beneficie de él. Los eruditos en tafsir han investigado las razones de esta facilidad, citando el verso: «Y ciertamente, hemos facilitado el Corán para recordar; ¿hay alguien que quiera recordar?». Ibn Abbas (que Allah esté complacido con él) afirma que si no fuera por esta facilidad, nadie podría pronunciar las palabras de Dios.
Relatos sobre los Profetas y Antiguas Naciones
El Corán relata las historias y noticias de los profetas y naciones con un nivel de detalle sin precedentes en los libros anteriores, tal como dice: «Y a todos, te relataré de los relatos de los profetas para fortalecer tu corazón».
Testimonio sobre las Escrituras Anteriores
El Corán se presenta como el broche final de los libros anteriores. Dios dice: «Él ha hecho descender el libro con la verdad, corroborando lo que estaba antes de él y ha hecho descender la Torá y el Evangelio anteriormente como guía para la humanidad».
Sumatoria de las Enseñanzas de los Libros Anteriores
El Corán comprende los principios fundamentales de las enseñanzas de los profetas, como lo expresa: «Y te hemos revelado el libro con la verdad, confirmando lo que había antes de él y controlando sobre él; así que juzga entre ellos conforme a lo que Dios ha revelado y no sigas sus deseos alejándote de la verdad que te ha llegado». Esto refleja que el Corán reafirma todo lo que es verdadero en estas escrituras, tales como la unicidad de Dios, la adoración exclusiva a Él, la creencia en Sus mensajeros, la existencia de la recompensa, y la práctica de buenas conductas.
Abrogación del Corán sobre las Escrituras Anteriores
Es requerido que toda la humanidad adore a Dios conforme a lo que establece el Corán, permitiendo solo lo que este permite y prohibiendo solo lo que prohíbe, ya que Dios dice: «Y quien busque una religión diferente al Islam, no será aceptada de él».
Características Generales del Corán
Las características del Corán incluyen criterios basados en su grandeza, elocuencia y singularidad:
Características desde la Perspectiva de su Estatus y Honor
Existen muchas características que subrayan la grandeza y el estatus especial del Corán, entre las cuales se destacan:
- Numerosos versos y hadices resaltan la posición del Corán.
- Es la Palabra de Dios, la guía recta y el camino hacia la salvación.
- Es la milagrosa herencia eterna del profeta, su prueba y su señal profética, un camino hacia la felicidad en esta vida y en la otra.
- Es el libro de la legislación y la base de la unicidad, una luz clara para la nación.
Intercesión del Corán por sus Ahogados
El Corán intercederá por aquellos que lo reciten en el Día del Juicio, como se relata en la narración de Abu Umamah Al-Bahili: «Reciten el Corán, porque ciertamente, vendrá el Día del Juicio como un intercesor para sus recitadores».
Sanación que Proporciona el Corán
El Corán se describe como una cura en varios versos, pues la palabra “cura” enfatiza el efecto sanador del Corán, como Dios declara: «Y revelamos del Corán lo que es sanación y misericordia para los creyentes». El Profeta Muhammad (la paz sea con él) se curó en su enfermedad final leyendo el Corán, y sus compañeros hicieron lo mismo, especialmente en la historia del envenenamiento que afectó a una persona de su comunidad, donde lo sanaron con la Surah Al-Fatihah. Aquellos que buscan refugio en el Corán deben tener fe en que la sanación es un don de Dios, el Altísimo.
La Devoción de Leer el Corán
Aquellos que leen o escuchan el Corán obtienen recompensas y bendiciones de Dios.
Variedad de Nombres y Descripciones del Corán
El Corán tiene múltiples nombres y numerosas cualidades, y se distingue de los otros libros por su revelación gradual, que ocurrió en un proceso escalonado.
Características del Corán en Términos de Estilo y Lenguaje
Algunas de estas características son:
- Facilidad de comprensión tanto para la gente común como para los especialistas.
Esta característica es un desafío para los elocuentes en su habla, quienes se dirigen a cada persona de acuerdo a su comprensión. Sin embargo, el Corán se dirige tanto a hombres como a mujeres, a jóvenes y ancianos, a eruditos y a la gente común, a reyes y cortesanos, utilizando las mismas aleyas sin alteraciones. A pesar de esto, todos encuentran en él lo que buscan y logran sus objetivos; el común encuentra consuelo y dulzura en su lectura, mientras que el erudito aprecia su elocuencia, descubre su sabiduría, y se maravilla con su belleza, sometiéndose así a Dios y abrazando Su legislación.
- Visualización de significados.
El Corán se distingue por su capacidad de representar conceptos de tal manera que se convierten en material tangible o visible. Este tipo de interpretación ha sido destacado por figuras como Sayyid Qutb al ilustrar la interpretación del Corán, como en el caso donde describe el día como un peso, al decir: «Y dejarán atrás un día pesado». Hay muchas formas estilísticas que emplea el Corán, incluyendo la combinación de generalidad y especificidad, la concisión con plenitud de significado, narración precisa, armonía estructural y su distintiva musicalidad, entre otros.
Otras Características del Corán
Existen muchas otras características del Corán, algunas de las cuales son:
La Memorización del Corán por el Pueblo: Dios ha confiado a la Ummah la tarea de preservar el Corán de manera que se necesite numerosas personas que lo memoricen para lograr la transmisión confiable, o de lo contrario, su comunidad será considerada culpable.
No se exige pureza para otros libros como los Evangelios y la Torá, que han sido modificados y alterados, a diferencia del Corán que el Profeta (la paz sea con él) instruyó sobre cada forma de salvaguardarlo, lo cual ha sido continuado por comunidades que memorizan el Corán, como se observa en los muchos centros de enseñanza del Corán en el mundo árabe.
- Transmisión Confiable del Corán
Dios ha bendecido a esta comunidad con una cadena de transmisión que se remonta al Profeta (la paz sea con él). La mayoría de los memoradores aprenden el Corán mediante la audición y guía de sus maestros, quienes a su vez fueron instruidos por sus respectivos mentores, y así sucesivamente hasta llegar al Profeta.
- Requisitos de Pureza para Tocar el Corán
El Corán fue revelado a través del mejor de los ángeles a través del mejor de los profetas, para la mejor de las naciones. Por ello, se exige un tipo de pureza para tocarlo que no se requiere para otros libros. Esto incluye la pureza del corazón de la idolatría, la hipocresía y la ostentación, así como el estado físico libre de impurezas mayores.
Los eruditos concuerdan en que la purificación es obligatoria para tocar el Corán, y hay acuerdo sobre la necesidad de realizar abluciones para el estado menor de impureza; además, algunos eruditos opinan que es obligatorio realizar abluciones antes de tocar el texto del Corán, y se recomienda que las prendas y la boca estén purificadas, siguiendo la práctica del Profeta y sus compañeros.
La Creencia en los Libros Revelados
La creencia en los libros sagrados anteriores es uno de los seis pilares de la fe. Los musulmanes deben tener fe en ellos de manera general, reconociendo en su corazón y con su boca que algunos han desaparecido y otros han sido alterados, pero todos han sido sustituidos por el Corán. Desde esta perspectiva, un musulmán tiene dos deberes:
- Creer en los nombres de los libros mencionados en el Corán y los nombres de los profetas a quienes fueron revelados, como las Páginas de Ibrahim (la paz sea con él), el Salmo dado a David (la paz sea con él), el Evangelio dado a Jesús (la paz sea con él) y la Torá entregada a Moisés (la paz sea con él).
- Creer que Dios tiene libros que ha revelado a Sus profetas que solo Él conoce, conforme a Su declaración: «Los seres humanos eran una sola comunidad, y Dios envió a los profetas como portadores de buenas nuevas y advertidores, y junto con ellos reveló el libro con la verdad para juzgar entre la gente en aquello en que discrepaban. Y no discrepaban en ello sino aquellos a quienes se les dio después de que las pruebas claras habían llegado a ellos, por enemistad entre ellos».
Pruebas de la Fe en los Libros Revelados
Existen numerosos versos en el Corán y hadices que evidencian la obligación de creer en los libros sagrados anteriores:
- La declaración divina: «Y quien repudie a Dios, a Sus ángeles, a Sus libros, a Sus mensajeros y al día de la resurrección, se ha desviado enormemente». Esta aleya enfatiza la obligación de la fe en los libros de Dios en general, así como en su veracidad, y que todo lo que Dios ha revelado es verdadero.
- «El mensajero ha creído en aquello que le fue revelado por su Señor, y también los creyentes; todos creen en Dios, en Sus ángeles, en Sus libros y en Sus mensajeros, no hacemos distinción entre ellos».
- El Profeta Muhammad (la paz sea con él) le respondió a Gabriel (la paz sea con él) cuando le preguntó sobre la fe: «La fe es creer en Dios, en Sus ángeles, en Sus libros, en Sus mensajeros, en el día del juicio y en la predestinación, tanto del bien como del mal».