Efectos de las quemaduras solares
Las quemaduras solares pueden provocar una serie de daños en la piel. A continuación, se enumeran algunos de los efectos más comunes:
- Náuseas.
- Dolor y sensación de hormigueo.
- Enrojecimiento de la piel.
- Problemas múltiples alrededor de los ojos.
- Deshidratación de la piel.
- Las quemaduras solares, especialmente si ocurren en la infancia, pueden aumentar el riesgo de cáncer de piel con el paso del tiempo.
Tratamiento para quemaduras solares mediante enfriamiento
Es fundamental enfriar el rostro tras haber estado expuesto a quemaduras solares. Aquí algunas maneras efectivas de hacerlo:
- Aplicar una toalla fría sobre la cara con suavidad.
- Mezclar partes iguales de leche y agua para aplicarlo sobre el rostro.
- Llenar una bañera con agua o utilizar un recipiente grande, cerrar los ojos, contener la respiración y sumergir la cara durante unos segundos.
Consejos para prevenir quemaduras solares
A continuación, se presentan valiosas recomendaciones para evitar las quemaduras solares:
- Usar un sombrero de ala ancha (10.16 cm) que proteja el cuello, las orejas y el cuero cabelludo del sol.
- Llevar gafas de sol de buena calidad para resguardar la piel alrededor de los ojos de los daños solares.
- Evitar la exposición a los rayos solares entre las 10 a.m. y las 4 p.m., ya que la piel es más susceptible a quemaduras durante este intervalo.
- Aplicar protector solar con un factor de protección (FPS) entre 30 y 50 aproximadamente 15 minutos antes de exponerse al sol, además de reaplicarlo cada una hora y media, especialmente si se está sudando o nadando.
Tratamiento de las marcas de quemaduras
El tratamiento de las marcas de las quemaduras dependerá de su gravedad, y se puede realizar de la siguiente manera:
- Quemaduras de segundo grado:
- Aplicar una capa de ungüento antibiótico para tratar las secuelas de la quemadura.
- Cubrir la quemadura con una gasa estéril, no adhesiva, para proteger la piel de infecciones y facilitar el proceso de curación.
- Quemaduras de tercer grado:
- Puede ser necesaria una intervención quirúrgica para estirar la piel.
- Este procedimiento implica tomar piel de una zona sana del cuerpo o de un donante, y luego injertarla para cubrir la zona afectada por la quemadura.