Síntomas de la deshidratación

Síntomas Leves

Uno de los síntomas iniciales de la falta de hidratación es el cambio en el color de la orina, que puede tornarse más oscuro. Este cambio es una de las señales más importantes que indican la presencia de deshidratación y una reducción de líquidos en el organismo.

Síntomas Moderados

Entre los síntomas moderados de la deshidratación y la insuficiencia hídrica se encuentran: sequedad bucal, dolor de cabeza, fatiga, mareos, así como calambres y debilidad en diferentes grupos musculares, junto con la sensación de piel fría y seca.

Síntomas Agudos

Los síntomas agudos de deshidratación se presentan cuando el cuerpo alcanza un estado crítico de falta de agua. Entre estos síntomas se incluyen el cambio del color de la orina a un amarillo oscuro muy intenso, piel extremadamente seca, falta de sudoración, aumento en la frecuencia del pulso, además de fatiga, pérdida de energía y sensación de inestabilidad. En casos severos, estos síntomas pueden progresar hasta llegar a la inconsciencia y delirios.

Síntomas Crónicos

En situaciones de deshidratación crónica, el cuerpo puede manifestar algunos de los síntomas mencionados o, por el contrario, no presentar síntomas evidentes. Esto se debe a que, en esta condición, el organismo se vuelve menos sensible a la deshidratación y a la falta de líquidos, comenzando a adaptarse a un consumo menor de agua. Esta situación puede provocar un aumento en la concentración y densidad sanguínea, haciendo que las personas en esta condición sean más propensas a sufrir un deterioro en la función renal con el tiempo.

Síntomas de Deshidratación en Niños y Bebés

Los niños no pueden expresar claramente su sed o una intensa deshidratación. Por lo tanto, es fundamental prestar atención a ciertos síntomas que indican que su cuerpo necesita hidratación. Algunos de estos síntomas incluyen:

  • Llanto sin lágrimas.
  • Sequedad en la boca y la lengua.
  • Disminución en la frecuencia al orinar.
  • Estado de inquietud.
  • Presencia de una fontanela hundida en el cráneo.
  • Hundimiento de los ojos o mejillas.

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