Inyecciones de Grasa
En los últimos años, la técnica de las inyecciones de grasa autóloga ha ganado una popularidad notable, superando en demanda a las intervenciones quirúrgicas estéticas tradicionales. Este procedimiento ha atraído a diversas segmentos de la población y su aceptación sigue en aumento debido a su facilidad de acceso y costo relativamente bajo. En este artículo, exploraremos los beneficios y desventajas de las inyecciones de grasa autóloga.
Beneficios de las Inyecciones de Grasa Autóloga
- Permiten eliminar zonas del cuerpo con grasa no deseada, mediante la extracción a través de una delgada cánula y posterior inyección en las áreas que se desea aumentar de volumen, facilitando así el acceso a la grasa.
- Es posible obtener cantidades significativas de grasa para rellenar áreas del cuerpo como el busto o los glúteos.
- No se presentan riesgos relacionados con el rechazo inmunológico o infecciones, ya que la grasa autóloga proviene del propio cuerpo del paciente.
- La grasa inyectada no se disuelve ni desaparece con el tiempo; estas células son permanentes y su tamaño puede reducirse con la pérdida de peso o incrementarse con el aumento de peso.
- La grasa extraída puede ser congelada y conservada, permitiendo su almacenamiento por hasta cuatro meses.
- Su consistencia es similar a la de los tejidos naturales del cuerpo, siendo además suave al tacto.
Desventajas de las Inyecciones de Grasa para el Rostro
- Es difícil prever qué cantidad de grasa se mantendrá y cuál se disolverá, ya que las inyecciones no permiten una identificación precisa. Los resultados pueden tardar en manifestarse, y se estima que aproximadamente la mitad de la grasa inyectada podría no perdurar. Para sobrevivir, la grasa necesita recibir nutrientes, los cuales llegan a través de los tejidos y no de vasos sanguíneos. Así, después de un mes es poco probable que ocurra disolución, excepto si se sigue una dieta que conlleve pérdida de peso, en cuyo caso se puede compensar la porción disuelta con grasa congelada.
- Puede haber una discrepancia en el tamaño de las áreas tratadas, resultando que un lado sea más grande que el otro debido a la disolución de la grasa. Esto podría requerir una nueva inyección de grasa almacenada dentro de tres meses.
- La grasa inyectada puede infectarse si se contamina con bacterias, lo que es más probable al inyectar grandes volúmenes de grasa, aunque estas infecciones son poco frecuentes.
- La grasa debe ser extraída del mismo paciente y no de otra persona, independientemente de la relación de parentesco, lo que resalta la necesidad de tener un porcentaje adecuado de grasa corporal; por esta razón, los individuos delgados que no poseen un exceso de grasa no son candidatos para el procedimiento.
- El procedimiento requiere tiempo quirúrgico dependiendo de la cantidad de grasa a inyectar, y puede necesitar anestesia local para volúmenes pequeños o anestesia general si la cantidad es significativa.