Ajuste del estilo de vida
Para mitigar la acidez estomacal, se recomienda seguir una serie de pautas. A continuación, se presentan las más destacadas:
- Evitar las comidas copiosas.
- Reducir el peso corporal.
- Adoptar una dieta baja en carbohidratos.
- Abstenerse del consumo de alcohol.
- Limitar la ingesta de café y jugo de limón.
- Mascar chicle.
- Evitar el consumo de cebolla cruda.
- Disminuir la ingesta de bebidas gaseosas y chocolate.
- Evitar el uso de menta en sus diversas formas.
- Elevar la cabecera de la cama durante la noche.
- No comer durante las tres horas previas al sueño.
- Adoptar una postura cómoda al dormir.
Tratamientos farmacológicos
La acidez estomacal puede ser controlada mediante el uso de diferentes grupos de medicamentos. A continuación se detallan algunos de los más utilizados:
- Inhibidores de la bomba de protones: como el omeprazol y el rabeprazol. Este grupo representa una opción primaria y esencial en el tratamiento de la acidez estomacal.
- Antagonistas del receptor H2: como la cimetidina, la ranitidina y la famotidina. Esta categoría también es fundamental en el tratamiento de esta condición.
- Antiácidos, específicamente aquellos que contienen carbonato de calcio, bicarbonato de sodio, aluminio y hidróxido de magnesio. Cabe destacar que estos medicamentos no requieren receta médica y están disponibles en farmacias en forma de tabletas y jarabes.
Intervenciones quirúrgicas
La cirugía se considera en situaciones donde los medicamentos y modificaciones en el estilo de vida no logran controlar los síntomas de la acidez estomacal. La cirugía más común para la enfermedad por reflujo gastroesofágico es la funduplicatura, que puede realizarse mediante un enfoque laparoscópico. Adicionalmente, un procedimiento moderno conocido como «LINX» también puede ser considerado.