La descendencia, una joya de la vida
El Versículo Sagrado dice: «La riqueza y los hijos son la adornación de la vida mundana…». Así, una descendencia recta representa una de las más grandes bendiciones que Allah ha otorgado a Sus siervos en este mundo, siendo fuente de felicidad para los padres cuando sus hijos son justos. Existen diversas razones que contribuyen a la rectitud de la descendencia; a continuación se detallan algunas de ellas.
Causas para la bendición de una buena descendencia
Primera: La importancia de la oración
La oración es uno de los actos de adoración más significativos y efectivos en la vida de un musulmán en general, y en la rectitud de los hijos en particular. Las súplicas de los padres por sus hijos son generalmente aceptadas. El compañero Abu Huraira -que Allah esté complacido con él- narró que el Profeta Muhammad -la paz y las bendiciones de Allah sean con él- dijo: «Hay tres súplicas que son aceptadas: la súplica del oprimido, la del viajero y la del padre por su hijo». Por lo tanto, la oración continua por los hijos es una de las mejores estrategias para guiarlos y mejorar su condición. En el Sagrado Corán, se relata cómo los profetas pedían a Allah por una descendencia piadosa; por ejemplo, el profeta Ibrahim -la paz sea con él- suplicó a su Señor por un hijo recto diciendo: «¡Oh Señor mío! Concede me de entre los justos».
Segunda: La elección adecuada de la pareja
Los padres tienen la responsabilidad de elegir con sabiduría a sus parejas antes de que nazca su hijo. El hombre debe seleccionar una madre piadosa que sepa educar a sus hijos por el camino recto, y la mujer debe elegir a un esposo justo que proteja a sus hijos y la ayude en su crianza. Por esta razón, el Profeta -la paz y las bendiciones de Allah sean con él- aconsejó la elección de esposas de fe sólida. En el Sahih de Al-Bujari, Abu Huraira -que Allah esté complacido con él- narra que el Profeta -la paz y las bendiciones de Allah sean con él- dijo: «Una mujer se elige por cuatro razones: su riqueza, su linaje, su belleza y su religión; así que elige a quien sea religiosa, que tus manos se llenen de polvo».
Tercera: La crianza y educación adecuada de los hijos
La buena crianza y educación de los hijos es un derecho fundamental de los mismos. El Profeta -la paz y las bendiciones de Allah sean con él- enfatizó la importancia de educar a los niños, especialmente a las niñas, declarando: «Quien es probado con estas niñas y actúa bien con ellas, será un refugio para él del Fuego». Este hadiz resalta el valor de criar a los hijos hacia la rectitud. El Profeta se refirió especialmente a las niñas porque ellas son las futuras madres y educadoras de las generaciones. Por eso, Allah -el Altísimo- ha establecido que un hijo recto es una caridad continua para los padres tras su muerte, como se menciona en el hadiz: «Cuando muere el hijo de Adán, su obra se detiene, excepto en tres cosas: caridad continua, conocimiento aprovechable o un hijo recto que le invoque».
Cuarta: La equidad entre hijos e hijas
Es vital que los padres sean justos en su trato con todos sus hijos, tanto hombres como mujeres. La equidad es, de hecho, un derecho de los hijos, como se menciona en varias tradiciones del Profeta -la paz y las bendiciones de Allah sean con él-. Por ejemplo, sobre la autoridad de Al-Nu’man ibn Bashir -que Allah esté complacido con él-, el Profeta -la paz y las bendiciones de Allah sean con él- dijo: «Teman a Allah y sean justos con sus hijos, así como desean que ellos sean buenos con ustedes». No es permitido favorecer a las hijas sobre los hijos o viceversa en ninguna situación. Desde una perspectiva ética, uno debe aceptar lo que Allah -el Altísimo- les ha otorgado en cuanto a hijos, sean hombres o mujeres.