Número Mínimo de Rakat para la Oración de la Noche
Según las enseñanzas del Profeta Muhammad -la paz sea con él-, el número de rakats que solía realizar durante la oración de la noche, tanto en el mes de Ramadán como en otros momentos, no excedía las once. Este relato proviene de la madre de los creyentes, Aisha -que Allah esté complacido con ella-. Es preferible que los musulmanes realicen esta cantidad para seguir el ejemplo del Profeta, aunque también se permite aumentar el número según el deseo del orante sin problemas. El requisito mínimo para la oración de la noche es una única rakat, es decir, la rakat del witr, y cualquier número adicional que el musulmán realice será, sin duda, un beneficio para él.
Virtudes de la Oración de la Noche
La oración de la noche conlleva muchas virtudes y tiene un estatus elevado, entre las cuales se destacan:
- Es considerada una de las características de los justos, como se menciona en el Corán, donde Allah -exaltado sea- describe a quienes realizan esta oración.
- La oración nocturna es superior a la oración diurna, según las palabras del Profeta -la paz sea con él-, ya que es más cercana a la sinceridad, implica una mayor dificultad y en ella se experimenta una mayor contemplación y humildad.
- Realizar la oración de la noche es un medio para alcanzar la entrada al Paraíso.
- La oración nocturna es un honor para el creyente.
- Ayuda a coincidir con la hora de respuesta, que se encuentra en el último tercio de la noche, conocido como el tiempo de la revelación divina.
- Es una causa de la misericordia de Allah -exaltado sea- hacia el siervo.
Consejos para Realizar la Oración de la Noche
Para que el musulmán pueda mantener la práctica de la oración de la noche, es esencial contar con ciertas ayudas, tales como: reconocer su grandeza y los inmensos recompensas que conlleva, observar la felicidad de aquellos que la practican tanto en esta vida como en la otra, y reflexionar sobre cómo eleva las almas y perdona los pecados. Además, ser consciente del valor del tiempo y la importancia de aprovecharlo en obras buenas contribuirá a mantener esta práctica. Asimismo, es útil acostarse temprano, evitar el exceso de comida y alejarse de los pecados y de los asuntos mundanales superfluos.